2 de abril: Día del Veterano y de los Caídos en la guerra de Malvinas.

El 2 de abril de 1982, la dictadura cívico-militar inició el desembarco de tropas en las islas Malvinas, usurpadas por Inglaterra desde 1833. Con esta acción de afirmación de la soberanía nacional, apoyada por un importante sector de la población, la dictadura intentaba ocultar la gravísima situación social, política y económica a la que había conducido su gobierno.
El conflicto armado concluyó el 14 de junio de 1982 con la rendición de la Argentina y provocó la muerte de 649 soldados argentinos, 255 británicos y 3 civiles isleños. Se considera que la derrota militar aceleró el fin de la dictadura.
El 22 de noviembre de 2000 el gobierno nacional estableció el 2 de Abril como el Día del Veterano y de los Caídos en la guerra de Malvinas.

Recomendamos para esta fecha tan significativa en la historia argentina, dos títulos de nuestra editorial EDUVIM:

Sinopsis
Isabel, una niña de 8 años, descubre los sentimientos que envuelven el corazón de su papá, un excombatiente de la Guerra de Malvinas. En ese descubrimiento aparece una guerra cercana y presente, la que aún vive en el imaginario de todos los soldados que alguna vez lucharon. Es una historia contada desde la metáfora, con intertextualidades y teniendo en cuenta valores claves para el desarrollo social, como el respeto, la tolerancia, la igualdad, la amistad, el amor de padre a hijo, el saber entender, el perdón, entre otros.
Sinopsis
Las crónicas de guerra son un rubro establecido desde hace mucho tiempo en el mundo de la historieta. Mi generación, aquella que entró en la adolescencia durante la posguerra de los cincuenta, se nutrió de esos relatos inspirados en el catastrófico evento de la Segunda Guerra Mundial y, en algunos casos, en la de Corea. Derrochaban imágenes de acción frenética, plagadas de onomatopeyas anglofónicas: ¡BANG!, ¡RAT-TAT-TAT!, ¡CRACK!, ¡KA-BOOM!, y otras varias. Pepe es uno de esos hombres que durante casi todo el siglo xx no existieron en la Argentina: es un veterano de guerra. Y además, dibujante humorista. Y ahora, para mi sorpresa, un Ernie Pike de la Guerra de Malvinas. Pero un Ernie Pike de carne y hueso, un “yo estuve allí”, un Cómo yo gané la Guerra. Acompañado por las efectivas ilustraciones de Javier Solar, Pepe Angonoa ofrece un vívido testimonio lleno de piadoso humor. Y eso basta.